Lágrimas de hada
Todo el mundo conoce a las hadas, porque todos hemos sido niños...
Si no puedes recordarlas entonces cierra los ojos, pon tu mente en blanco siente ese perfume de la infancia .
Olvidarnos de las hadas es un error en el tiempo, una falla que tenemos al crecer , pero en el fondo intuimos la verdad , sabemos que estan acunando a nuestros niños, velando sus sueños a traves de la ventana.
Por eso vuelve a tu patio , a tu parque a tu plaza . Abraza fuerte esa muñeca que te trajo Papá Noel , estruja las ruedas de aquel autito y las verás , transpórtate en aquel túnel , siente su presencia otra vez como cuando eras un niño , y al fin admirarás su luz , te llenarás de caricias de alas de libélula...
Dicen que las hadas nacen de las gotas de rocío que dejan escapar los camalotes , o que si respiras muy hondo en un bosque frondoso exhalarás miles de hadas volando al encuentro de alguna rama.
Otros dicen que las hadas mas apasionadas toman su color del fuego , cuando las cenizas se esparcen por el aire .
Cuentan también que las hadas nacen de la primer risa de un recién nacido , aseguran que en los bosques patagónicos si aún no has perdido la inocencia podrás verlas , saltando y jugando con los niños, esclavizando el tiempo y reteniendo cada risa , cada mirada que los pequeños les regalan , porque al ser mayores perderán esa magia , y ya no irán a buscarlas para escuchar su canto .
Algunas abuelas cuentan emocionantes historias de hadas , porque en el fondo de su corazón aún guardan esa ternura tan propia de los niños.
Los mas racionales dicen que son esos amigos imaginarios que uno tiene en la infancia , los bohemios dicen que son su musa inspiradora y su fuente de paz .
Para mí son seres con magia , con una dulzura capaz de aliviarte las heridas , con una ternura inigualable , siempre dispuestas a prestarte sus alas para que puedas volver a empaparte de sueños y estrellas .
Cuenta una leyenda que Manolito vivía en una cabaña del bosque y desde su ventana alcanzaban a verse todas las cumbres nevadas de la cordillera.
Todos los días se internaba a jugar con Miyén , el hada que vivía en la espuma que formaba una cascada al romper con el lago , y Manolito era muy travieso , le encantaba tentar a Miyén para que saliera de su cascada a bailar con él.
Cierto día Manolito se entretuvo demasiado cantando y bailando con las hadas , es que era el día de los deseos , y todas las hadas del bosque habían concurrido a la cascada a festejar.
Entre tanta risa y tanto juego la noche cubrió el bosque por completo , Manolito ya no supo como volver a su cabaña , ni siquiera la luz de las hadas más luminosas alcanzaba para mostrarle el camino , y todos saben que las hadas del bosque no pueden salir de allí , como las ninfas no salen del mar y los elfos se acomodan eternamente a vivir en la maceta de tu balcón.
Abril ya estaba terminando y la noche llegó con su manto de oscuridad y frío , Manolito temblaba de miedo y la temperatura comenzaba a pincelar de azul sus bonitos labios , las hadas asustadas se fueron acomodando alrededor de sus manitos , formaban aureolas alrededor de su dedos , tejían interminables mantos de alas alrededor de su cuerpo.
Manolito se enfriaba rápidamente , lágrimas dulces y dolorosas comenzaban a brotar de miles de ojitos que expectantes esperaban la luz del sol , lágrimas fucsias que nutrían la tierra en donde dormía Manolito , lágrimas azules que rodaban por el sendero...
Cuando el sol comenzó a pincelar todos los secretos del bosque Manolito despertó con las caricias de su madre , se sorprendió al verse envuelto en sedas tornasoladas .
Nunca más volvió a ver a sus amigas las hadas , se encontró con otras por supuesto , y con los años comenzó muchísimas amistades con los duendes de su jardín , pero esas , las que consolaron su miedo y calmaron su frío , esas nunca mas volvieron...
Durante días visitó la cascada en busca de Miyén , pero ella ya no estaba , el lago tenía un color mas azul que el de costumbre , y la espuma de la cascada se había tornado mucho mas blanca , las gotitas salpicaban la carita de Manolito como con destellos de alas . Pero Miyén ya no estaba.
Los que creyeron la historia de Manolito dicen que las aguas del Lago Puelo le deben su color a esas lágrimas azules , y que si te gustan las grosellas , estan en el bosque gracias a esas lágrimas fucsias . Debes tener cuidado con las espinas, porque las hadas dejaron sus alitas endurecidas por el frío allí , por eso si llegas a pincharte , recuerda que estas sintiendo el sufrimiento de esos seres , que dejaron sus sueños y suspiros por la vida de un niño....
Si alguna vez necesitas de un hada recuerda , sonríe , piensa en chupetines y rondas , en algodones de azúcar y casitas de muñeca en patines y patinetas . Siéntete un niño y , mira hacia el bosque y verás que todo tiene un brillo especial ,y que miles de ojitos de luciérnaga te estan esperando.
Luciérnagas ?
A mis 3 amores
Todo el mundo conoce a las hadas, porque todos hemos sido niños...
Si no puedes recordarlas entonces cierra los ojos, pon tu mente en blanco siente ese perfume de la infancia .
Olvidarnos de las hadas es un error en el tiempo, una falla que tenemos al crecer , pero en el fondo intuimos la verdad , sabemos que estan acunando a nuestros niños, velando sus sueños a traves de la ventana.
Por eso vuelve a tu patio , a tu parque a tu plaza . Abraza fuerte esa muñeca que te trajo Papá Noel , estruja las ruedas de aquel autito y las verás , transpórtate en aquel túnel , siente su presencia otra vez como cuando eras un niño , y al fin admirarás su luz , te llenarás de caricias de alas de libélula...
Dicen que las hadas nacen de las gotas de rocío que dejan escapar los camalotes , o que si respiras muy hondo en un bosque frondoso exhalarás miles de hadas volando al encuentro de alguna rama.
Otros dicen que las hadas mas apasionadas toman su color del fuego , cuando las cenizas se esparcen por el aire .
Cuentan también que las hadas nacen de la primer risa de un recién nacido , aseguran que en los bosques patagónicos si aún no has perdido la inocencia podrás verlas , saltando y jugando con los niños, esclavizando el tiempo y reteniendo cada risa , cada mirada que los pequeños les regalan , porque al ser mayores perderán esa magia , y ya no irán a buscarlas para escuchar su canto .
Algunas abuelas cuentan emocionantes historias de hadas , porque en el fondo de su corazón aún guardan esa ternura tan propia de los niños.
Los mas racionales dicen que son esos amigos imaginarios que uno tiene en la infancia , los bohemios dicen que son su musa inspiradora y su fuente de paz .
Para mí son seres con magia , con una dulzura capaz de aliviarte las heridas , con una ternura inigualable , siempre dispuestas a prestarte sus alas para que puedas volver a empaparte de sueños y estrellas .
Cuenta una leyenda que Manolito vivía en una cabaña del bosque y desde su ventana alcanzaban a verse todas las cumbres nevadas de la cordillera.
Todos los días se internaba a jugar con Miyén , el hada que vivía en la espuma que formaba una cascada al romper con el lago , y Manolito era muy travieso , le encantaba tentar a Miyén para que saliera de su cascada a bailar con él.
Cierto día Manolito se entretuvo demasiado cantando y bailando con las hadas , es que era el día de los deseos , y todas las hadas del bosque habían concurrido a la cascada a festejar.
Entre tanta risa y tanto juego la noche cubrió el bosque por completo , Manolito ya no supo como volver a su cabaña , ni siquiera la luz de las hadas más luminosas alcanzaba para mostrarle el camino , y todos saben que las hadas del bosque no pueden salir de allí , como las ninfas no salen del mar y los elfos se acomodan eternamente a vivir en la maceta de tu balcón.
Abril ya estaba terminando y la noche llegó con su manto de oscuridad y frío , Manolito temblaba de miedo y la temperatura comenzaba a pincelar de azul sus bonitos labios , las hadas asustadas se fueron acomodando alrededor de sus manitos , formaban aureolas alrededor de su dedos , tejían interminables mantos de alas alrededor de su cuerpo.
Manolito se enfriaba rápidamente , lágrimas dulces y dolorosas comenzaban a brotar de miles de ojitos que expectantes esperaban la luz del sol , lágrimas fucsias que nutrían la tierra en donde dormía Manolito , lágrimas azules que rodaban por el sendero...
Cuando el sol comenzó a pincelar todos los secretos del bosque Manolito despertó con las caricias de su madre , se sorprendió al verse envuelto en sedas tornasoladas .
Nunca más volvió a ver a sus amigas las hadas , se encontró con otras por supuesto , y con los años comenzó muchísimas amistades con los duendes de su jardín , pero esas , las que consolaron su miedo y calmaron su frío , esas nunca mas volvieron...
Durante días visitó la cascada en busca de Miyén , pero ella ya no estaba , el lago tenía un color mas azul que el de costumbre , y la espuma de la cascada se había tornado mucho mas blanca , las gotitas salpicaban la carita de Manolito como con destellos de alas . Pero Miyén ya no estaba.
Los que creyeron la historia de Manolito dicen que las aguas del Lago Puelo le deben su color a esas lágrimas azules , y que si te gustan las grosellas , estan en el bosque gracias a esas lágrimas fucsias . Debes tener cuidado con las espinas, porque las hadas dejaron sus alitas endurecidas por el frío allí , por eso si llegas a pincharte , recuerda que estas sintiendo el sufrimiento de esos seres , que dejaron sus sueños y suspiros por la vida de un niño....
Si alguna vez necesitas de un hada recuerda , sonríe , piensa en chupetines y rondas , en algodones de azúcar y casitas de muñeca en patines y patinetas . Siéntete un niño y , mira hacia el bosque y verás que todo tiene un brillo especial ,y que miles de ojitos de luciérnaga te estan esperando.
Luciérnagas ?
A mis 3 amores
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